Llevo más de 15 años trabajando como educador social en el ámbito de la salud y de las adicciones. Conozco planes estratégicos de ayuntamientos y comunidades autónomas, los he visto evolucionar con el paso de los años. También conozco diferentes programas de prevención y de intervención, algunos oficiales y otros nacidos dentro de los barrios y los centros educativos. En estos 15 años he visto como los esfuerzos para dar respuesta al problema de las adicciones, sobre todo en la gente más joven, han ido evolucionando y siendo cada vez más ambiciosos, pero hasta ahora nunca había visto que la diversidad intelectual fuese abordada al hablar de este tema.
Los colectivos que se dedican a ello conocen los problemas y los riesgos a los que se enfrentan estas personas, que son diversas y algunas de ellas muy capaces de llevar una vida autónoma y adulta. Y es desde estos colectivos de donde nos ha llegado el reto de trabajar la salud y la prevención de adicciones con el alumnado de un programa de inserción laboral. El Ayuntamiento de Madrid ha sabido asumir este reto y nos ha puesto a trabajar de manera conjunta al Centro de Adicciones de Tetuán y al Centro Madrid Salud de Fuencarral para poder dar una respuesta adecuada a esta demanda.
Hoy he tenido la oportunidad de hacer prevención con las chicas y chicos del Programa FOCUS, gestionado por la Fundación Síndrome de Down Madrid. Ha sido una experiencia más que satisfactoria, y desde aquí quiero dar las gracias a todo el grupo por su participación, su confianza y su atención. Como profesional he de decir que he aprendido yo más que ellos, porque ha sido un momento de romper muchos prejuicios respecto a la realidad y la capacidad de estas personas.
Salvo que haya alguien cercano a ti con un nivel intelectual diferente, no solemos pararnos a pensar lo que ello implica. De hecho, ni siquiera imaginamos que estas personas tengan algún tipo de riesgo en relación con las drogas, ni con muchas otras cosas porque no les vivimos como una parte de nuestra sociedad. Además, son invisibles en los espacios de ocio y encuentro donde mayoritariamente acudimos. Sin embargo, son personas que salen con sus grupos de amigos, que ven como usan el tabaco y el alcohol sus hermanos y familiares, y que están inmersos en la misma sociedad de consumo, también para las drogas, en la que estamos el resto. Y porque las influencias que tiene son las mismas que las de toda la sociedad, y la curiosidad que tienen es la misma que la tuya o a mía, es necesario hablar con ellos de las adicciones, de sus riesgos y de sus consecuencias. Hay que hacer prevención con ellos: darles información adecuada y ajustada, ayudarles a descubrir cómo decir que no, cómo elegir mejor y cómo descubrir las trampas que hay tras la seducción de las drogas. Es decir, hay que tratarles como al resto de adolescentes y jóvenes, porque todo este trabajo de prevención es el que hemos hecho tradicionalmente con ellos.
Muchas gracias a Sandra, la profesora que vio esta necesidad y tuvo la idea de descolgar el teléfono. Muchas gracias a Madrid Salud por atreverse a ir más allá y hacer prevención para todos. Y sobre todo muchas gracias al grupo de chicas y chicos de FOCUS por su participación y su enseñanza.
La diversidad nos enriquece y sólo atreviéndonos a conocerla mejor podremos dar las respuestas adecuadas. Así, conseguiremos una sociedad donde todas y todos tengamos verdaderamente las mismas oportunidades.
Y recuerda, si no puedes hacerlo solo o sola, en Servicio PAD, prevenimos y tratamos las adicciones en adolescentes y jóvenes del consumo de alcohol y/u otras drogas, del uso abusivo de la tecnología o con riesgos o problemas asociados al juego de azar.
¡Llámanos! 699 480 480
Santiago Redondo Bueno
Educador Social
Servicio de Prevención de Adicciones